Es muy importante que los entrenadores y formadores planifiquen sus entrenamientos, sobre todo en las etapas formativas.
Es obligación planificar y programar las sesiones de entrenamiento en lo posible a largo plazo.
Existen varias razones por las cuáles planificar a largo plazo (García Manso, J.M., Navarro, M. y Ruiz J.A. (1996).
- Se aumenta el rendimiento en la competición.
- Nos hace ser conscientes de la duración y de las etapas por las que hay que pasar para lograr los objetivos finales.
- Se introduce una organización racional de los medios y métodos de entrenamiento.
- Se facilita la valoración específica y concreta del progreso del deportista.
- El máximo rendimiento solo se puede lograr cuando se ponen los medios y las bases desde la infancia hasta la adolescencia.
Según lo señalado por este autor, podemos encontrar diferentes etapas en edades de formación: etapa de comienzo, etapa de especialización y etapa de alto rendimiento.
Godik y Popov (1996), nos dicen que son seis los aspectos que inciden en el desarrollo del entrenamiento y en la planificación:
1. La carga de entrenamiento, el número de competiciones y el grado de especialización que debe aumentar con los años.
2. Los elementos del entrenamiento, que tienen que ir distribuyéndose en función de las etapas que marquemos y de la especialidad (intensidad, volumen).
3. La carga de entrenamiento, que debe aumentar cada año y debe respetar las variaciones de la periodización anual.
4. El volumen de la carga, que debe incrementarse lentamente.
5. Diferenciar claramente entre lo que es el entrenamiento de jóvenes y el de los adultos que están en alto rendimiento.
6. Definir correctamente los fines, medios y sistemas de entrenamiento que vamos a utilizar en cada etapa.
En la actualidad, en general los entrenadores, por los tipos de competencia, tienen la tendencia a trabajar por microciclos; con esto los mesociclos van a estar en función de los objetivos que deseo conseguir en los microciclos y por esto la carga de trabajo será diferente según el tipo de microciclo.
Se pueden distinguir tres tipos de microciclos:
- Microciclos competitivos.
- Microciclos precompetitivos.
- Microciclos preparatorios.
Todos estos puntos, que señalan los diferentes autores y especialistas son interesantes para tener en cuenta al momento de preparar, planificar y estructurar una sesión de entrenamiento, cada una de las cuáles se realizan y dividen generalmente en tres partes:
- Parte inicial o calentamiento.
- Parte principal.
- Parte final o vuelta a la calma.
Es obligación planificar y programar las sesiones de entrenamiento en lo posible a largo plazo.
Existen varias razones por las cuáles planificar a largo plazo (García Manso, J.M., Navarro, M. y Ruiz J.A. (1996).
- Se aumenta el rendimiento en la competición.
- Nos hace ser conscientes de la duración y de las etapas por las que hay que pasar para lograr los objetivos finales.
- Se introduce una organización racional de los medios y métodos de entrenamiento.
- Se facilita la valoración específica y concreta del progreso del deportista.
- El máximo rendimiento solo se puede lograr cuando se ponen los medios y las bases desde la infancia hasta la adolescencia.
Según lo señalado por este autor, podemos encontrar diferentes etapas en edades de formación: etapa de comienzo, etapa de especialización y etapa de alto rendimiento.
Godik y Popov (1996), nos dicen que son seis los aspectos que inciden en el desarrollo del entrenamiento y en la planificación:
1. La carga de entrenamiento, el número de competiciones y el grado de especialización que debe aumentar con los años.
2. Los elementos del entrenamiento, que tienen que ir distribuyéndose en función de las etapas que marquemos y de la especialidad (intensidad, volumen).
3. La carga de entrenamiento, que debe aumentar cada año y debe respetar las variaciones de la periodización anual.
4. El volumen de la carga, que debe incrementarse lentamente.
5. Diferenciar claramente entre lo que es el entrenamiento de jóvenes y el de los adultos que están en alto rendimiento.
6. Definir correctamente los fines, medios y sistemas de entrenamiento que vamos a utilizar en cada etapa.
En la actualidad, en general los entrenadores, por los tipos de competencia, tienen la tendencia a trabajar por microciclos; con esto los mesociclos van a estar en función de los objetivos que deseo conseguir en los microciclos y por esto la carga de trabajo será diferente según el tipo de microciclo.
Se pueden distinguir tres tipos de microciclos:
- Microciclos competitivos.
- Microciclos precompetitivos.
- Microciclos preparatorios.
Todos estos puntos, que señalan los diferentes autores y especialistas son interesantes para tener en cuenta al momento de preparar, planificar y estructurar una sesión de entrenamiento, cada una de las cuáles se realizan y dividen generalmente en tres partes:
- Parte inicial o calentamiento.
- Parte principal.
- Parte final o vuelta a la calma.
Mauricio Benavides M.